lunes, 30 de septiembre de 2013

El problema no es traer a Mario Silva...


Le doy roda la razón a Toby Valderrama cuando dice – palabras más, palabras menos – que los medios de comunicación son el arma principal de esta época donde se libra una batalla de cuarta generación, y en este sentido me apoyo en lo que siempre dice Walter Martínez en Dossier, que se libran dos guerras; la real y la de los medios de comunicación. La última es fundamental ganarla, siempre me acuerdo del Presidente Chávez que decía que su gobierno hubiese tenido más apoyo popular si no existieran tantos medios adversos – o vendidos – a la oligarquía venezolana pero sobre todo a la internacional, que al fin y al cabo son la misma cosa.

Pero aquí voy a recordar dos cosas muy importantes que no se nos pueden olvidar porque están íntimamente ligadas al título del presente artículo: en un programa de televisión el Presidente Chávez decía que el cañón más fuerte, poderoso, que tenía el proceso revolucionario en Venezuela era Venezolana de Televisión (VTV), pero se quejaba de que todos los medios de comunicación de la revolución estaban incomunicados, que no respondían sus políticas comunicacionales a un proyecto común (y ahora sí es verdad que están peor), que era sumamente importante crear un sistema nacional de medios públicos, para ese momento ya se llamaba así, y le pidió encarecidamente, casi de ruego, a Ernesto Villegas que diseñara una política comunicacional para que esos medios de comunicación revolucionarios estuviesen sincronizados, que no estuvieran cada uno por su lado; Ernesto estaba recién nombrado Ministro de Comunicación e Información, ¿qué hizo Ernesto ante la petición del Comandante Hugo Chávez? Le cambió el nombre al sistema y lo llamó Sistema Bolivariano de Comunicación e Información; le dio megáfonos a algunos concejos comunales para que salieran a informar a la gente de lo que pasaba en el país, región, localidad; y al ver que eso que hizo no sirvió para nada, es más, lo desautorizaron en su propia cara cuando empezaron a sacar del aire los programas que eran las referencias ideológicas del pueblo venezolano, se fue como candidato a la Alcaldía Mayor apenas se lo propusieron. Se le olvidó la petición de nada más y nada menos que Hugo Chávez, vergüenza le debería dar a ese señor poner semejante torta, para después aparecerse en un mitin en Caracas con un collar de ajos y tener que pedir disculpas posteriormente por el collarcito. Me disculpa camarada pero usted no respondió al compromiso que le dio el Comandante en Jefe, debió dar un paso al lado y dejar a otro que lo quiera hacer mejor. Mejor no le digo que ante la vergüenza los japoneses honestos se suicidan.

Lo peor de todo esto es que Chávez lo colocó como Ministro por lo que todos pensábamos que era Ernesto Villegas, un excelente periodista, entonces ahora no puede como Ministro y se va a buscar cambur como Alcalde Mayor de Caracas. Cuando sacan a Mario Silva del aire el muy pendejo lo informa al país por un twitter, como si eso hubiese sido cualquier cosita mínima.

La segunda cosa que quiero recordar es que Chávez le dijo a Maduro que se ocupara de las comunas como a su propia vida, ¿qué ha pasado con las comunas? Nada, esos son instrumentos populares que han servido de muy poco, y se está demostrando en esta coyuntura económica donde la gente pone la esperanza de que la cosa se solucione en Eduardo Samán porque el poder popular no puede o no sabe hacer nada. Mucha tristeza me dio al escuchar por una emisora radial en La Fría, estado Táchira, a una maestra que tiene como trabajo recoger, ella solita, toda la información de los concejos comunales del Municipio García de Hevia y de la parroquia Rivas Berti del Municipio Ayacucho del mismo estado, a pie, es decir, ella misma costeándose sus gastos, y de paso, el trabajo lo hace ella ad honores. Decía la maestra que la información que recogía incluía lo necesario para darle el presupuesto del año 2014 a esos concejos, rogaba por radio esta señora a los concejos comunales para que prepararan esa información que sería llevada a San Cristóbal para su tramitación, ¡¿Cómo pueden los concejos comunales estar en semejante estado de abandono?! O las personas que trabajan para esos consejos, sin apoyo de transporte, ni comida, ni sueldo mínimo siquiera. ¿No se supone que los consejos comunales son el precedente de las comunas y que éstos son el alma y la vida organizativa de esta Revolución Bolivariana que se jacta de ser el soporte de las revoluciones de América Latina?

Y no hablemos de los ministros de alimentación y ambiente porque este artículo se extendería de sobremanera. Yo de todo esto, al igual que muchos autores de Aporrea.org y público en general, saco como conclusión que la muerte física del Presidente Chávez fue la muerte de la revolución misma, porque vemos cómo, poco a poco, se están abandonando las cosas que creó el Presidente para el beneficio de su pueblo, cómo, desde el vientre mismo de la Revolución surgen unos señores a contrariar lo hecho por Chávez, cosa que no hacían cuando él estaba con vida, ¿qué pasará con esta Revolución Bonita que sólo la quería y cuidaba mi querido Presidente? ¿Será que veremos a nuestros nietos jugar en las calles de la patria libre y buena como él lo soñaba? Veremos……

26/09/2013
3:30 p.m.

Un recuerdo para los héroes de la masacre de Cantaura

Un recuerdo para los héroes de la masacre de Cantaura

Un lunes 4 de Octubre de 1982, hace ya treinta y un años, en los llamados chamguriales del Morocho Evans; en una zona boscosa de árboles pequeños, ubicada en el municipio Pedro María Freites, cerca del pueblo de Cantaura, al sur del Estado Anzoátegui, se ejecutó un horrendo genocidio, cuando varios centenares de militares y policías, previo una operación de bombardeo y ametrallamiento desde aviones y helicópteros; en una acción de exterminio, que el periodista Alexis Rosas, describe en su libro publicado en el año 2005 titulado La Masacre de Cantaura, donde reseña las siguientes victimas:

Baudilio Valderrama Herrera Veracierta, estudiante, 18 años.

Carmen Rosa García, estudiante, 19 años.

Luis José Gómez, dirigente estudiantil, 19 años.

Julio César Farías , dirigente estudiantil, 20 años.

Jorge Luis Becerra Navarro, estudiante, 20 años.

Nelson Pacín Collazo, estudiante, 23 años.

Itamar Lorenzo Morillo, estudiante, 23 años.

Eusebio Ricardo Martel Masa, dirigente obrero, 23 años.

Beatriz del Carmen Jiménez, estudiante, 24 años.

Antonio María Echagarreta Hernández, dirigente político, 24 años.

Mauricio Tejada, estudiante, 25 años.

María Luisa Estévez Arranz, estudiante, 27 años.

Rubén Alfredo Castro Batista, dirigente obrero, 27 años.

Diego Alfonzo Carrasquel, estudiante, 28 años.

José Isidro Zerpa Colina, obrero, 28 años.

Euménides Isidora Gutiérrez Rojas, maestra graduada, 28 años.

José Miguel Núñez, estudiante, 29 años.

Carlos Alberto Zambrano Mira, dirigente político, 30 años.

Sor Fanny Alfonso Salazar, socióloga, 32 años.

Carlos Hernández Anzola, obrero, 32 años.

Roberto Antonio Rincón Cabrera, Primer Comandante del Frente Américo Silva. (FAS), 32 años.

Enrique José Márquez, Segundo Comandante del FAS, 32 años.

Emperatriz Guzmán Cordero “Chepa”, Tercer Comandante 38 años., compañera de Pedro Veliz Acuña, líder fundador del FAS.

La composición del grupo era evidentemente de gente joven y de pueblo, vinculada políticamente al movimiento Bandera Roja, que ya para entonces observaba una descomposición política interna.

Solo un pequeño grupo de guerrilleros pudo romper el cerco militar y salir por la llanura de la Mesa de Guanipa, al mando de Alejandro Velásquez Guerra, testigo de excepción para la reconstrucción de la masacre de Cantaura.

Es de señalar que para la época era Presidente el Dr. Luis Herrera Campins, Ministro de Defensa, Luis Narváez Churión, Ministro del Interior, Luciano Valero y por los Cuerpos de Seguridad del Estado, Remberto Uzcàtegui, Arpad Bango, Henry López Sisco, Orlando García, Rafael Rivas Vásquez, el “Mono” Morales Navarrete, y como delatores del grupo guerrillero, los hermanos Norberto y Alirio Rabanales.

A treinta y un años de la masacre de Cantaura, familiares, combatientes de la época y jóvenes patriotas Bolivarianos, nos encontraremos, una vez más en Cantaura, este viernes 4 de octubre para recordar a nuestros mártires y junto a la Fiscal General Dra. Luisa Ortega Díaz y la Comisión de la Verdad y la Justicia, ratificar nuestro llamado para denunciar los crímenes, desapariciones, torturas y otras violaciones de los derechos humanos por razones políticas, en el periodo 1958-1998 ocurridos en tiempos del Puntofijismo. Diremos entonces como el poeta Pablo Neruda en su poema:


LOS ENEMIGOS……

“Por esos muertos, nuestros muertos,
pido castigo.

Para los que de sangre salpicaron la patria,
pido castigo.

Para el verdugo que mandó esta muerte,
pido castigo.

Para el traidor que ascendió sobre el crimen,
pido castigo.

Para el que dio la orden de agonía,
pido castigo”.

Para los que defendieron este crimen,
pido castigo.

No quiero que me den la mano
empapada con nuestra sangre.

Pido castigo”.

La cita es en Cantaura este viernes 4 de octubre, en la tarde.